La capacidad de síntesis es algo que atribuyo más a los demás que a mí misma. Suele gustarme planificar las subordinadas de mis textos, irme por la tangente, incorporar rarezas incomprensibles a mis relatos, y modos que no hacen otra cosa que sumar caracteres a la prosa.
Sin embargo, en los primeros años de secundaria, suelo buscar que mis alumnos impriman claridad y precisión a sus textos. Claro, es lógico confundir extensión con precisión (extensión máxima: 15 renglones. Estampida de “¿pueden ser más?” “¿máxima o mínima?”). Y claro también, en los primeros años respetar la consigna es todo un tema.
—“Chicos, una gran historia no es la historia más larga, sino la más precisa, la que atrapa desde la exactitud de las palabras utilizadas, de las formas convocantes”.
Y otra vez me repito: “la consigna debe ser muy clara”. Más claridad que el mismo texto no te deje seguir escribiendo, echale agua. El twitter está hecho para dar Surrealismo y vanguardia en 1º año, —pienso en voz alta.
Por lo tanto, luego de una clase teórico-introductoria, de las formas de expresión, de los temas abordados y del contexto histórico de las vanguardias en general y el surrealismo en particular; luego de sendas lecturas de Rimbaud, Oliverio, Felisberto Hernández, Baudelaire, Macedonio y Alejandra Pizzarnik, pediré a los chicos que se saquen una cuenta de twitter.
Nuevamente la consigna deberá ser clara: dividiremos la clase en grupos de a cuatro o cinco integrantes y propondré un tema para cada grupo, y a escribir textos/fragmentos/microrrelatos en 140 caracteres. Luego, los publicaremos en twitter, con un hashtag elegido para tal fin (#3del7). Haremos particular hincapié en la idea de lo público (todos vemos el mensaje enviado en forma de poesía) y del uso del lenguaje.
Y de la idea de lo público pensaremos en el trabajo en equipo, en el trabajo colaborativo; en cómo armar pequeñas o grandes poesías o relatos vanguardistas a partir de la conjunción de todos los relatos. Hablaremos de la construcción colectiva. Construcción de lo público que se hará visible en un paper li creado para ordenar la información hecha poesía.
Querré lectura consciente del “sí mismo” y de “los otros” y pediré recorridas y críticas certeras desde un buen lugar, desde el lugar de la construcción. Pediré que se haga de cada tema en principio, una poesía o un relato de vanguardia. Deberán los cuatro o cinco integrantes de cada grupo trabajar conjuntamente en la elaboración de esta suerte de “cadáver exquisito”. Y todas las voces (todos los twitters) deberán ser parte de él. Todas estarán yuxtapuestas en el relato infinito que parte finito.
El valor se vislumbrará al final de la actividad. Seremos extensos desde lo breve, seremos equipo de trabajo desde lo individual; romperemos la línea de lo privado e indiviso, seremos menos selectivos en principio. Seremos todos.
Seremos vanguardia porque seremos todos. Y diré, con Arthur Rimbaud: “Solidísimos bribones. Muchos han explotado vuestros mundos”.